Viñedo Extremo

Nací donde muy pocos pueden crecer. He sentido el sol abrasándome y el frío sellando cada poro de mi piel. Soy hijo del tiempo y el silencio. Vino hecho de razón y pasión. Pertenezco a la ley de los opuestos, a la ley de la atracción. Es aquí donde lo imposible es posible.

Zona de producción

En medio de nada y cerca de todo. La D.O.P. Calatayud ocupa la zona mas occidental de la provincia de Zaragoza, lindando con Soria, Guadalajara y Teruel. A 87 kilómetros de la capital aragonesa y a tan solo 1 hora de Madrid en AVE.

Su zona geográfica la componen los términos municipales de:

Abanto
Acered
Alarba
Alhama de Aragón
Aniñón
Ariza
Atea
Ateca
Belmonte de Gracián
Bubierca
Calatayud
Cárenas
Castejón de las Armas
Castejón de Alarba
Cervera de la Cañada
Cetina
Clarés de Ribota
Codos
Daroca
El Frasno
Fuentes de Jiloca
Godojos
Ibdes
Jaraba
Maluenda
Manchones
Mara
Miedes
Monterde
Montón
Morata de Jiloca
Moros
Nuévalos
Munébrega
Murero
Olves
Orcajo
Orera
Paracuellos de Jiloca
Ruesca
Sediles
Terrer
Torralba de Ribota
Torrijo de la Cañada
Valtorres
Velilla de Jiloca
Villalba del Perejil
Villalengua
Villafeliche
Villarroya de la Sierra
La Vilueña

Valles sinuosos, ondulados piedemontes y sierras al azote del frío son los tres hábitats principales de esta reproducción en miniatura de la cuenca del Ebro, surcada por afluentes como el Jalón o el Jiloca y en el regazo de las estribaciones del imponente Moncayo.

La intrincada orografía, entre los 650 y 1.100 metros, da variedad al terreno y perfila el singularísimo carácter de nuestros vinos: vides que conviven en altura con almendros, cerezos y olivos. Abajo, en la vega, al arrullo del río, los viñedos reposan junto a manzanos, perales y melocotoneros.

La altitud de los viñedos impone una vendimia especialmente tardía, que arranca por lo general a finales de septiembre y puede alargarse hasta mediados de noviembre.

Esa paciencia en el tiempo da como resultado una lenta maduración de las bayas, y hace posible que alcancen su punto álgido de carga fenólica antes de ser recolectadas.

La altitud de los viñedos impone una vendimia especialmente tardía, que arranca por lo general a finales de septiembre y puede alargarse hasta mediados de noviembre.

Esa paciencia en el tiempo da como resultado una lenta maduración de las bayas, y hace posible que alcancen su punto álgido de carga fenólica antes de ser recolectadas.

Clima

Inviernos gélidos, veranos sofocantes. La particularidad de los vinos de la D.O.P. Calatayud le debe todo a un clima extremo, continentalizado, con una temperatura media anual de 13,1ºC.

Con heladas que se prolongan entre 5 y 7 meses al año, la variación térmica entre el día y la noche en época de maduración es amplísima. La orografía también fomenta esta extrema variedad: temperaturas más benignas y precipitaciones bajas en el fondo de la fosa. A medida que se asciende, el frío arrecia y aumentan las lluvias, con una pluviometría media entre 300 y 550 mm.

Nuestros suelos

El terreno, ondulante, asienta la mayor parte del viñedo en suelos pedregosos, sueltos, con escasos nutrientes y elevada proporción caliza. Presentan buena permeabilidad y están sanos.

Gravas

Compuesto por guijarros y cantos rodados, procedentes de aluviones, con buen drenaje.

La vid vegeta muy bien en este tipo de suelos proporcionando vinos complejos,intensos, estructurados y carnosos.

Margas

Están compuestos por calizas y arcillas. Son suelos ideales para la viticultura, ofreciendo poca resistencia a la penetración de las raíces. Reflejan la luz solar y almacenan su calor para el periodo nocturno. 

Los vinos resultantes son vinos con cuerpo, cálidos, potentes y aromáticos, aptos para la crianza.

Pizarras grises

De color más oscuro que las pizarras rojas retiene el calor del día y lo desprenden por la noche. Son suelos de escasa profundidad por lo que la roca madre aflora a los pocos centímetros de profundidad.

Suelos fáciles de trabajar con tempero pero muy laboriosos una vez pierden la humedad.
Los vinos resultantes tienen alta graduación alcohólica y proporcionan bajos rendimientos. Vinos muy estructurados y también resultan minerales.

Pizarras rojas

Procedentes de arcillas compactadas a grandes presiones. Son suelos de baja fertilidad sin apenas retener el agua de lluvia.

Los vinos resultantes tienen un componente mineral característico, son vinos sutiles, finos y elegantes.

Arcillo-ferruginosos

Son suelos compuestos por arcillas principalmente y con altos contenidos en hierro y cantos poco rodados Son suelos con bastante perfil, pudiendo sobrepasar los 3 mts. de profundidad.

Los vinos tienen graduación alcohólica alta y mucho color.